28 mayo 2010

Memoria: Homenaje a Tostão// Brasil 1970

TOSTAO, privilegiado integrante y talentoso partícipe de aquel enorme Brasil del 70

"Lo del Inter es una victoria del estilo de la selección brasileña. Mucha marca, poca presión y rápido contraataque. Nada de eso funcionaría sin un gran arquero, excelentes defensores y atacantes"

La frase corresponde a Tostão, uno de los mejores jugadores de la historia de Brasil, tal es así que la FIFIA lo considera entre los mejores 15 fútbolistas sudamericanos del siglo XX. Tostao, o Eduardo Gonçalves de Andrade, nació en Belo Horizonte en 1947, y formó parte del equipo de Brasil en el Mundial México 1970, que luego se conoraría campeón.

Eduardo Galeano, escribió en su libro El Fútbol a sol y sombra lo siguiente: "En el Mundial del 70, Brasil jugó un juego digno de las ganas de fiesta y la voluntad de belleza de su gente. (...) Aquel Brasil fue un asombro: presentó una selección lanzada a la ofensiva, que jugaba con cuatro atacantes, Jairzinho, Tostão, Pelé y Rivelino, que a veces eran cinco y hasta seis. En la final, esa aplanadora pulverizó a Italia 4-1". Con ese equipo contaba Brasil y con esos compañeros compartió la cancha Tostão.

"La pequeña moneda" (a ello se debe el apodo Tostão), comenzó jugando en el América Mineiro, y luego pasó al Cruzeiro, donde debutó en Primera a los 19 años. Tostão fue un zurdo dotado gran habilidad, exquisita pegada, magníficos pases y una imaginación ilimitada dentro del campo de juego. Jugaba tan bien con pelota o sin ella, definitivamente un estilista del balón. Fue apodado en su tiempo, como luego le sucedería a otro genio del fútbol carioca como lo fue Zico, el "Pelé blanco".

Lamentablemente una lesión en el ojo, lo obligó a abandonar el fútbol con solo 26 años. En 1969 recibió un balinazo en la cara que le povocó el desprendimiento de la retina, sin embrago, luego de una operación saisfactoria pudo regresar y brillar en el Mundial del año siguiente. Pero todo acabaría luego de sufrir una nueva lesión en el mismo ojo en 1973. A pesar de su corta carrera, es considerado junto a Teófilo Cubillas, Elías Figueroa, Roberto Rivelino y Mario Kempes, los futbolistas sudamericanos más destacados de los años 70...

Tal vez a Tostão le duela admitir que Brasil hoy transita por el camino del cerrojo y el contraatque, "mucha marca, poca presión", tal vez duele más si se evoca aquel equipo ilustre del 70, o tal vez duela simplemente por la visión del mismo, fuera de comparaciones, por el sistema en sí.

"El fútbol en su máxima dimensión. Gol de Brasil. Tostão, la pelota, Pelé, el festejo. La multitud que llenó el estadio azteca de México fue testigo de una final para la historia". Con esas palabra ilustra Clarín la foto de abajo de la final ante Italia.
Ese Brasil respetó sus raíces y lo que se vio fue sublime, incomparable. ¿Tal vez por eso le duele a Tostão lo que dijo?

11 mayo 2010

El estilo de Wernicke...

El gesto sincero de Moralez

Durante el partido que Velez le ganó 4-1 a Chacarita por el torneo Clausura 2010, el volante de Liniers, Maximiliano Moralez, le cometió una durísima falta sobre la mitad de la cancha al jugador Omar Zarif a los 16 minutos del segundo tiempo. La patada fue tan dura que el volante del Funebrero debió salir lesionado (ingresó Serapio) y árbitro le mostró la tarjeta amarilla al enganche de Vélez Sarfield.

Tras el encuentro, Moralez admitió: "Pudo haber sido roja en vez de amarilla, no tuve intención pero fue fuerte. Mandé pedirle disculpas" Un gesto de sinceridad fuera de lo común en estos tiempos. Algo que retrata la grandeza de esta persona de talla pequeña. Detalles que no obviaremos en PALOYGOL, el lado positivo del Fútbol.

Adherimos, claro, a tanta nobleza.

07 mayo 2010

FRANCOTIRADOR

Viernes, 7 de Mayo

Sergio Dubcovsky
Polémica más inútil no hay
A 35 días del Mundial, una polémica era lo único que no hacía falta. Mucho menos una tan menor y protagonizada por integrantes de un mismo bando. Resulta difícil de entender por qué Maradona y el hijo de Grondona salen a vociferar por los medios su bronca que tiene como eje un módico amistoso en Dubai ante los Emiratos Arabes.
La virulencia de las quejas de Diego está unas cuantas octavas arriba del tono que se aconseja. Cuando la clave está en definir la lista y conseguir tranquilidad, el mismo entrenador se genera un clima hostil y áspero, como si se sintiera cómodo en el conflicto. Si bien se puede entender que un partido de prueba podía significar algo en la preparación, sobran argumentos para celebrar la sorpresiva suspensión: menos viajes, evitar cambios de clima, más descanso, más tiempo para entrenamientos.

Pero si la indignación de Maradona ya era incomprensible, la cruzada patoteril de Humbertito Grondona para defender a su padre, presidente de la AFA, no tiene razón de ser. Con códigos mafiosos, el coordinador de las Selecciones Juveniles amenaza por elevación al técnico diciendo que quien se meta con su padre deberá soportar su reacción.
Ese modo de relacionarse, de mostrar el desacuerdo, de aceptar las contingencias y las dificultades, no hace más que sembrar preocupación.

Si no existen intereses ocultos en ese bendito partido suspendido, Maradona y Grondona Jr deberían bajar los decibeles y pensar en ese concepto que de tanto usarlo se ha vaciado de contenido: el grupo.

Para ganar un Mundial no solamente hace falta fútbol y coraje sino también una convivencia apacible, con gente tolerante y bienintencionada.

Roman Exquisito


MONTENEGRO 10

MONTENEGRO  10