30 julio 2011

Los conceptos de Gambetita Latorre

Estoy viendo el partido entre México y Argentina por la primera fecha del Grupo F. Es el Mundial Sub 20 de Colombia, lo pasan por Fox Sports, como siempre. El que comenta es Latorre. Hay, de repente, cambio en el equipo azteca. Sale un jugador supuestamente encargado de la creación por uno “de marca” para mejorar en la obstrucción del juego argentino. Es ahí cuando Latorre habla y comienza a apuntar lo relativo del asunto. Poner un jugador etiquetado de los que corren o marcan no garantiza mejor robo de pelota. A veces, incluso, jugar con dos creativos puede ser más efectivo que utilizar a los especialistas del quite. Porque en el fútbol, hurtarle el instrumento de juego al contrario es una tarea grupal, integral, de conjunto. Que tiene que ver, entre otras cosas, con el achique de espacios, con la presión bien ejercida, planteando las líneas bien juntas… Y para eso no se necesitan jugadores que se tiren a trabar, o eximios en el anticipo. Ayudan claro, pero su solo ingreso no garantiza una mejor defensa. Es una confusión muy común, especialmente en el área del periodismo que cuando se ve ingresar a uno de marca por un creativo se afirma que el equipo va a mejorar en ese momento en la obtención de la pelota. Y no es así. No es porque ingresó aquél jugador. Tiene que ver con lo antes apuntado.

Mirá las fotos del Mundial Sub 20
El ahora jugador de Roma fue el autor del único tanto del partido.
Fútbol directo
Otro de los conceptos que volcó Latorre fue con respecto al fútbol directo. Con este modo de jugar se le está faltando el respeto al elemento más esencial del fútbol: la sorpresa. Sin movilidad no se puede distraer al rival para meter la puntada en el momento justo y deseado. Jugando siempre igual, con la misma fórmula, con todas pelotas largas es imposible prosperar. No lo va a hacer nunca. Con la salvedad, claro, de los arrebatos individuales que con su puro talento maquillan esta realidad. Prescindiendo de esos imponderables casos, el equipo que usa el fútbol directo como propuesta y no como recurso esporádico es imposible que prospere. Argentina sufrió este déficit gran parte del partido, especialmente en el primer tiempo. Lamela no tuvo un socio con quien juntarse, y por eso decidió apostar a incursiones solitarias o a meter pelotazos largos para Ferreyra, el único delantero neto. Sin sorpresa es imposible inquietar, y sin movilidad es imposible la sorpresa.

1 comentario:

  1. Bravo gambetita.
    La mantira del "fútbol vertical" nos arruinó el mundial 2002, de la mano de esa GRAN mentira llamada Bielsa.

    ResponderBorrar

Si no opinás no sé que te pareció

Roman Exquisito


MONTENEGRO 10

MONTENEGRO  10